Si en las formas de mi pecho
No cabría tu sonrisa cuando te cobijas.
Si tus mejillas en mi pecho
No hicieran su dulce nido ovillándose.
Y tu voz y tus ojos, toda tú
Como angelito descansando,
Como un gatito arrullándome
Con su ronroneo.
No habría en mí, sonrisa ni alegría
alguna
Como la que me dejas en las noches.
Porque…
Si tus dulces besos llegan a mi pecho
Mi ser entero se vuelca estremecido
A mirarte como te miro para recibirte
con cariño.
Si tus manos hábiles y fuertes
Se lanzan en caricias sobre mi pecho
Mi alma encuentra paz y descanso.
Porque sólo al mirarte dándome tanta
ternura
Mi alma calla y se anima en una
querencia inmensa por ti Bonita.
25
de julio, 08:22
No hay comentarios:
Publicar un comentario